Los 3 mejores libros de Andrea Bajani

Las distancias generacionales no son impedimento para establecer otro tipo de paralelismos como los que se crean entre Erri de Luca y Andrea Bajani. Porque luego está lo de la idiosincrasia de cada país o región. Un pozo sin fondo donde estos dos autores encuentran poso para sus tramas que van del detalle a lo trascendental, de lo anecdótico a lo universal. Una prosa que sintoniza en esa búsqueda de dentro hacia afuera pero que después ya, en cada autor describe escenarios diferentes e intenciones dispares desde ritmos y cadencias personalísimas. Que ahí es donde está la gracia de la literatura más auténtica.

En última instancia Andrea Bajani se empeña en no dejarnos impasibles frente a las vivencias de unos personajes que protagonizan la vida en su diversidad de posibilidades sondeadas con una tenaz intención de investigación existencial. Todos los habitantes de las historias de Bajani desnudan sus almas con esa agradable sensación de lejanía frente a la medianía marcada desde el empeño de uniformidad de nuestros tiempos.

Cuando un escritor adquiere ese compromiso por adentrarse (y adentrarnos) en la piel de sus personajes, el resultado es una lucidez que llega desde lo empático. La cuestión además es revestir todo con una trama viva capaz de convencer a lectores de todo espectro. El resultado es una bibliografía que se abre paso poco a poco con la contundencia de las creaciones que apuntan a clásicos por su naturaleza humanística.

Top 3 libros recomendados de Andrea Bajani

Mapa de una ausencia

Ausencia como extensión de una alienación más que común en un mundo actual que insufla vanas esperanzas o que orienta hacia felicidades imposibles por el mero hecho de su esencia material o por su inalcanzable estela.

Una novela de gran madurez que afronta, con una dulzura melancólica pero no carente de ferocidad, temas graves y universales. Es la historia de un abandono y, al mismo tiempo, de una iniciación, de una pérdida de las ilusiones y de una educación sentimental.

Cuenta las vicisitudes de un personaje, pero también las de dos países, Italia y Rumanía, donde los empresarios italianos han trasladado sus fábricas por conveniencia. Nos habla pues de la extraña Europa de hoy, que se presenta como el faro de Occidente aunque en ella la iniquidad campe por doquier. De esta obra he apreciado también el talento narrativo y el amor por el lenguaje. Este idioma nuestro, tan noble y tan antiguo, se ve asediado en la actualidad por un burdo idiolecto mediático y político que lo está devorando. Por eso una escritura así me alegra y me consuela, porque a su manera es también una forma de resistencia».

Mapa de una ausencia

Saludos cordiales

Formalismos que invitan al desastre. Avisos de derrota por burofax o carta certificada. Ningún amor ni tampoco buen deseo llega por los cauces que requieren de acuse de recibo. Lo que ocurre después es una invitación a la desesperanza y la desubicación.

Tras la marcha de la empresa del todopoderoso director de ventas, un gris empleado retoma uno de los más denostados cometidos de este: escribir las cartas de despido, supuestamente humanas e inspiradoras, a sus compañeros, quienes por los pasillos le llaman el Matarife mientras él recibe los elogios de una dirección demencialmente empeñada en purificar, recortar y producir.

Pero no solo retoma del exdirector su rol como liquidador…, también el de padre de sus hijos pequeños Martina y Federico, quienes trastocan sus costumbres y convicciones enseñándole los rituales tiernos y algo anárquicos de una dolorosa paternidad de emergencia. De esta forma también descubrirá que unos pocos instantes de felicidad pueden cambiar la lógica del rendimiento, los controles de calidad, los premios de productividad y la gestión de los recursos humanos.

Saludos cordiales

El libro de las casas

La historia de un hombre a través de las casas en las que ha vivido. Un personaje del que no llegamos a saber el nombre –es simplemente Yo–, pero sí todos los detalles de su vida. Que se va reconstruyendo en una sucesión de fragmentos: la compleja relación con su violento padre, la presencia de la madre atemorizada, la tortuga que vive en el patio, la emigración de la familia al norte, las estancias en ciudades extranjeras, el matrimonio, el ascenso social, la relación con una amante, el espacio íntimo en el que se refugia para escribir… Cada una de esas etapas, cada una de las emociones de ese personaje –la educación sentimental, los anhelos, las decepciones, el amor, las traiciones, la soledad…–, están relacionadas con una casa.

De fondo, dos acontecimientos históricos, dos hechos sangrientos, proporcionan el contexto: el secuestro y asesinato de El Prisionero y el asesinato de El Poeta, que no son otros que Aldo Moro y Pier Paolo Pasolini, cuyas muertes violentas definen los años de plomo de Italia. Y es que si la novela es ante todo la historia de un hombre a lo largo de su vida, también es, en cierto modo, la historia de Italia en los últimos cincuenta años, porque los fragmentos que constituyen esta novela se enmarcan entre los setenta del pasado siglo y un futuro más o menos lejano en el que solo la tortuga seguirá viva.

Andrea Bajani ha escrito una novela singularísima y fascinante, en la que, a través de los espacios que habitamos, se reconstruye la historia de un ser humano con todas sus contradicciones, miedos y deseos. No es una simple pirueta: es el retrato de un alma a través de las casas en que ha vivido.

El libro de las casas
5/5 - (9 votos)

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.