Los 3 mejores libros del prodigioso Harlan Coben

Aviso para visitantes vía Netflix por «El inocente». No, no he seleccionado esa novela de Harlan Coben. Lo cual tal vez sea buena noticia porque hay cosas aún mejores…

La pléyade de escritores estadounidenses con raices judías se completa con grandes genios que van de Philip Roth a Isaac Asimov, o de Saul Bellow hasta Paul Auster. Solo algunos de los más reconocidos ejemplos de bibliografías made in jews que abordan multitud de géneros o que incluso trazan vanguardias creativas.

Harlan Coben pertenece a la nueva generación de escritores que aún conservan ese sello de identidad de lo judío adaptado a las circunstancias americanas. Y la cosa es que en eso sí que el Estados Unidos más abierto y cosmopolita parece haberse convertido en el mejor de los lugares para alojar a todo tipo de orígenes y creencias (parné mediante, eso sí).

Pero avatares demográficos aparte y centrándome en el prota de este post, descubrir a Coben es siempre una invitación hacia una lectura trepidante. Las tramas Coben son un juego hacia la resolución de un enigma de tintes policíacos, con algún criminal suelto para completar sus historias con la tensión propia de caminar bajo el punto de mira o cerca del filo del cuchillo.

Lo mejor de Coben es eso, que una vez atraviesas la puerta de sus libros y te sientas para atender su propuesta, el asunto te salpica y te implica desde el segundo uno. Coben es un narrador hipnótico, una especie de abogado de su causa narrativa que te va embelesando hacia la oscuridad, y que muchas veces acaba convirtiéndose en abogado del diablo de sus giros imprevisibles que lo han hecho famoso mundialmente.

Top 3 libros recomendados de Harlan Coben

No se lo digas a nadie

En ocasiones el secreto más triste es aquel que puedes acabar compartiendo con tu más despiadado enemigo o con tu miedo más desolador. David Beck tiene mucho que saber acerca de la muerte de su querida Elizabeth.

El árbol que cobijaba su amor parece contener secretos que transmitir desde su energía vital, y los ecos de la verdad llegan como un susurro al entendimiento ofuscado de un David que aún vive entre el pasado, el instante crítico con sus millones de opciones para evitar la muerte, y un futuro que no termina de aparecer como el horizonte que por fin calme su desazón.

La justicia está a punto de ocuparse de la vida del asesino. Y es entonces cuando la muerte empieza a jugar sus nuevas cartas y a ir desvelando sus siniestros secretos.

Un paso en falso

De la saga de Mylon Bolitar, el atípico agente de deportistas que acaba sirviendo a la causa de la saga para entrometerse hasta la cocina de cualquier otro personaje, esta novela es para mí la más viva, la que más auténticamente nos mueve por ese argumentario de giros imposibles.

Porque cuando se jugan dinero, pasiones e intereses cruzados cualquier trama en manos de Coben funciona como una vibrante partida de cartas sobre un tapete en el que tan pronto hay millones en juego como vidas humanas. Bolitar es un títere en manos del narrador que lo ubica en mitad de una refriega incontenible pero soterrada que puede acabar de cualquier forma y con pocas probabilidades de que ésta forma sea amistosa.

Seis años

Lo mejor de Coben es que, pese a participar en el mercado de las sagas para fidelizar lectores o para sabe Dios que tipo de estrategia editorial, nunca ha dejado de publicar esas historias independientes que se disfrutan con mayor suficiencia y autonomía, que encandilan y que no precisan de escenarios previos.

Novelas que lo son todo en su única existencia. Y esta historia aborda una trama muy especial. Habla de amor, de nostalgia, de romanticismo, de renuncia al ser querido. Solo que, en uno de los giros más intensos de Coben, pronto nos enfrentamos desde la perspetiva de Jake Fisher a los motivos más extraños para el pacto del olvido que otrora amantes firmaron.

Natalie decidió emprender nuevos caminos junto a otro hombre. Y Jake asumió esa historia de que eran demasiado diferentes. Hasta que años después algunos pequeños detalles van componiendo un escenario bien distinto. Él nunca pudo olvidar a Natalie, hoy más que nunca porque todo apunta a una traición a la altura de Hamlet.

Seis años

Otros libros recomendados de Harlan Coben

La coincidencia

Expuesto al mundo en crudo. Con todos los sentidos volcados en descubrir los grandes interrogantes como necesarios pilares al emerger desde la nada. Así es como uno jamás olvida sus dudas más hondas, volcando todo su ser en ubicarse en el mundo. Una búsqueda que puede convertirnos en una nueva evolución capaz de diferenciar casualidades de señales del destino…

Él siempre ha sido Wilde, el chico que encontraron en unas montañas de Nueva Jersey viviendo solo y de forma salvaje. Han pasado más de treinta años de aquello y nunca ha sabido cuáles eran sus orígenes. Ha llegado el momento de averiguar algo de su familia, para lo cual recurre a los servicios de una empresa de análisis de ADN.

Los resultados le conducen hasta su padre biológico, pero su encuentro genera más preguntas que respuestas. Esa no es la única sorpresa. La búsqueda de ADN acaba revelando otra coincidencia, otro familiar, un personaje mediático. Sin embargo, tan pronto como lo encuentra, este desaparece repentinamente. Wilde no se va a detener ahora: quiere averiguar la verdad por muy terrible que sea.

El chico del bosque

El asesinato perfecto es el que se comete sobre la víctima propicia. Pasar inadvertido o simplemente ser observado para la burla y el ninguneo dispone a la persona en esa alienación de las personalidades excéntricas y apartadas. Es algo así como nacer estrellados y pasar a ser objetivos del mal en cualquiera de sus representaciones. Total, casi nadie echa de menos a quien nunca estuvo…

A casi nadie parece importarle la ausencia de Naomi Pine, una adolescente sin amigos y víctima del acoso escolar. Solo hay una excepción: su compañero de clase Matthew, que se siente culpable por no haberla defendido de sus despiadados compañeros de curso.

Tras una semana sin noticias de Naomi, Matthew recurre a su abuela, la célebre abogada televisiva Hester Crimstein, y a su padrino, Wilde, para averiguar dónde está la chica. El pasado de Wilde, que cuando era niño vivió solo en el bosque durante años, le impide integrarse del todo en una comunidad, pero tiene unas habilidades que pueden ser vitales para encontrar a la joven antes de que sea demasiado tarde.

El chico del bosque

Solo hay un ganador

Una de esas obras trepidantes sobre ladrones de guante blanco y sus inverosímiles tretas para conseguir sus objetivos. Solo que en este tipo de tramas todo puede desencadenar a peor, bajo la inercia de los sucesos precipitados hacia la culpa, la traición y todo ese cúmulo de sensaciones una vez conseguido el fin de un nuevo robo del siglo.

Hace más de veinte años robaron un Vermeer y un Picasso a la familia Lockwood. Poco después, Patricia Lockwood fue secuestrada y su padre, asesinado. Ella pudo escapar tras cinco meses de cautiverio, pero los responsables del robo y del secuestro nunca aparecieron. El tiempo acabó enterrando estos episodios traumáticos hasta ahora.

En lo más alto de un edificio de Manhattan acaban de encontrar un cadáver, el cuadro de Vermeer y una maleta que perteneció a Windsor Horne Lockwood III, o Win, como le llaman sus amigos. Win, el primo de Patricia, tiene dinero, inteligencia, frialdad y un particular sentido de la justicia. Se enfrenta a una situación delicada en la que el honor de su familia puede verse salpicado, pero él no es de los que perdonan, ni de los que esperan a que otros resuelvan sus problemas.

Solo hay un ganador
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